En nuestra comunidad autónoma, Castilla y León, tenemos la suerte de contar con un proceso sencillo y rápido para registrarnos como donantes. Se trata de una página web: https://castillayleon.medulaosea.org
Los requisitos para ser donantes son DOS muy sencillos:
-Tener entre 18 y 40 años.
-Estar SANO.
Además de información sobre la donación de medula ósea en texto y en un video corto, podemos rellenar el formulario para que nos envíen a nuestro domicilio:
–Kit de salivación para poder registrar nuestro ADN celular con las instrucciones de uso y envío.
–Consentimiento informado donde se te informa sobre cómo será la donación en el caso de ser compatible con algún enfermo y que deberás rellenar y firmar junto a un testigo (sirve cualquiera que tengas cerca), después de haberlo leído atentamente.
–Sobre pre franqueado para que puedas reenviar todo el material al centro de hemodonación de nuestra comunidad sin que haya ninguna duda de la dirección y sin coste alguno. Puedes depositarlo en cualquier buzón o en u oficina de Correos.
Y YA ESTÁ, al cabo de unos días recibirás la notificación de que ya estás inscrito en el REDMO a la espera de que te necesiten.
Durante cuatro días, se te administrará un medicamento, que hace que salga a tu torrente sanguíneo más cantidad de células madre de las que normalmente llevas.
Una vez pasados los 4 días, te citarán en el centro de hemodonación de referencia para la extracción que consiste en: te colocan una vía en uno de los brazos por donde se te extrae la sangre que irá pasando por una máquina (separador celular) que retiene las células madre y deja pasar el resto de la sangre que te es devuelta por otra vía en el otro brazo.
Es un proceso que suele durar entre 3 y 4 horas y así se termina, puedes irte a tu casa sin más molestias que un pequeño dolor muscular (hay quien ni eso) que se alivia con analgésicos normales.
Tras un examen exhaustivo y varias pruebas para comprobar que la compatibilidad es cercana al 100%, en quirófano y bajo anestesia general o epidural. La extracción se realiza mediante aspiración de la médula ósea presente en el hueso de la cadera, concretamente en la cresta ilíaca posterior. Es un proceso que dura aproximadamente dos horas y que requiere de ingreso hospitalario de 36-48 y conlleva los riesgos normales de una anestesia. Se emplea en casos especiales como en niños, personas de bajo peso o con historiales médicos complicados.